5/10/2020
anoche soñé a un hombre siendo deseado, era yo quien lo deseaba.
tenía puesto una especie de lencería de seda, recuerdo que lo miraba mucho. nos teníamos mucho cariño y me habló de cómo se sentía de chico, buscándose entre múltiples personalidades. me acuerdo de imaginarlo vestido de skater. describió la primera vez que se enamoró. le salían luces rosas del corazón. un poco me encandilaban. yo no podía parar de admirar la sensibilidad que manejaba. de repente empezamos a volar sobre amapolas, nos agarramos de la mano muy fuerte (tan fuerte que me desperté con las manos duras) siento que tenemos que dejar de volar, caemos muy rápido al piso. se pone a llorar y me deja ver que en sus manos posee una nebulosa que se estira, al mirar de cerca escucho las cosas que vivió, se ve tan real que me hace sentirlas.
claro que esta persona está siendo soñada, claro que no existe. creo nunca haber conocido a un hombre tan en contacto con su vulnerabilidad, que lindo sería. mientras pienso me doy cuenta que estoy cayendo en una pecera, me agarra la mano nuevamente y tira muy fuerte para que pueda salir. ahora las luces rosas pasaron a ser celestes. lo abrazo y veo como todo pasa a ser violeta, mejor dicho lila. no se bien como aparecemos en una playa de noche y todo se ilumina de ese lila fuerza, lila vulnerable, lila habitable más allá de todo lo impuesto. siento mucho su mirada y lo miro de la misma forma que cuando empecé a soñar.
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